La galeria Thema también se ha preocupado por la importancia de la enmarcación desde
el principio.
Y es por ello que toda la experiencia y el buen gusto se hayan materializado en la confianza
puesta por museos como el MuVIM y el IVAM.
Leer
"Meditación del marco" por J.Ortega y Gasset"
“…Busquemos, pues, un tema más humilde que el humilde cuadro de un
pintor.
Por ejemplo: su marco dorado.
Hagamos una breve meditación sobre el marco.
Viven los cuadros alojados en los marcos.
Esa asociación no es accidental. En un cuadro sin marco, su contenido parece derramarse por
los costados del lienzo y deshacerse en la atmósfera.
La relación entre uno y otro es, pues, esencial y no fortuita. El marco no es el traje para
el cuerpo, pues el traje para el cuerpo y el marco, en cambio ostenta el cuadro (…) Ahora
bien. El marco no atrae sobre sí la mirada (…) El marco en casa del artesano, sin
cuadro, es un marco cesante. Pero atraer sobre el cuadro no es la única eficacia del marco.
Imagínese una campiña y esta no está en la pared, en la cual está el
cuadro. El cuadro como todo arte, poesía o música en una abertura de irrealidad que
se abre mágicamente en nuestro contorno real. Cuando miro un cuadro, ingreso en un recinto
imaginario, y adopto una actitud de pura contemplación.
Son pues, pared y cuadro dos mundos antagónicos. De lo real a lo irreal el espíritu
da un brinco. Es la obra de arte una isla imaginaria que flota rodeada de realidad por todas
partes. La indecisión de confines entre lo artístico y lo real perturba nuestro goce
estético. De aquí que el cuadro sin marco, al confundir sus límites con los
objetos útiles extra-artísticos que lo rodean, piedra garbo y sugestión. Hace
falta que la pared real concluya de pronto y que súbitamente nos encontremos en un
territorio irreal del cuadro.
Hace falta aislar al cuadro. Y esto lo hace el marco. El marco no es ya la pared y no es
la
superficie encantada del cuadro. Frontera de ambas regiones, actúa de trampolín que
lanza nuestra atención a la dimensión legendaria de la isla
estética.”
José Ortega y Gasset (1883-1955)
“Meditación del marco”-“El espectador”-Tomo 3 (1921)